Cómo los médicos pudieron imprimir un rostro
En Inglaterra, Eric Moger recibió un
implante creado con una impresora 3D que le permitió cubrir la cicatriz
que le causó un tumor maligno.
La tecnología de impresión en 3D está irrumpiendo
fuertemente en el campo de la medicina, beneficiando a pacientes que
necesitan prótesis faciales para cubrir cicatrices causadas por
accidentes o enfermedades.
Recientemente, médicos británicos usaron precisamente
una impresora de este tipo para cambiarle la vida a un paciente
residente en la pequeña ciudad de Waltham Abbey, a 24 kilómetros de
Londres.
Eric Moger, de 60 años, recibió una prótesis facial para cubrir una
gran cicatriz en el lado derecho de su rostro, causada por un tumor
maligno diagnosticado hace cuatro años.
Fue la primera vez que se utilizaba en Reino Unido una
impresora 3D con este fin, una tecnología capaz de generar todo tipo de
objetos tridimensionales diseñados y modelados en computador.
"Esta es una máquina que cuenta con herramientas láser
para cortar, esculpir y amoldar piezas de plástico, silicona, nylon así
como metales como el titanio, con mucha más precisión y rapidez",
explicó a BBC Brasil el cirujano y dentista Andrew Dawood, responsable
del proyecto que desarrolló la prótesis de Moger.